sábado, 7 de julio de 2012

Faltos de ideas


Estoy falto de ideas. Justo igual que Hollywood. Hace un par de semanas tuve la oportunidad de ver los dos primeros de episodios de la nueva versión de Dallas. Nunca seguí la original, pero no parece que esta nueva adaptación vaya a captar mi atención. Cabe destacar que dos décadas después de terminar la célebre serie se mantienen algunos de los míticos personajes y actores, como J.R., Bobby y Sue Ellen, esta última desprendiendo botox por los cuatro costados. Las desavenencias familiares de los poderosos Ewing siguen centrando las tramas, y los chantajes, los montajes, las mentiras y las infidelidades están a la orden del día. También se ha recuperado la intro de apertura, pero en versión reducida. Una de las grandes curiosidades de este modernizado Dallas reside en que tres de sus nuevos protagonistas ya vivieron rivalidades y calamidades varias en Mujeres desesperadas: Brenda Strong (la Mary Alice que se suicida en el piloto), Jesse Metcalfe (el joven jardinero con el que Garbielle mantiene una aventura) y Josh Henderson (el rebelde sobrino de Edie Britt). Junto a ellos están Jordana Brewster, la chica de la saga A todo gas y Julie Gonzalo. Desde luego, el joven cast no padece problema de fotogenia alguno.
Uno de los problemas de estos remakes, reboots, precuelas, secuelas y demás es que ni siquiera dan al público tiempo de olvidar el producto original. Sensación de vivir y Melrose Place, por ejemplo, dos de los culebrones más icónicos de los noventa, han vuelto a nuestras pantallas recientemente, de la mano de la CW. 90210 ha sido renovada para una quinta temporada, mientras Melrose Place 2.0 sólo se mantuvo en antena una temporada. En ambas han aparecido intérpretes de las originales. La misma cadena es también artífice de la futura The Carrie Diaries, que seguirá las peripecias de la neoyorquina más pija en su adolescencia. ¿Podría permitirse la Bradshaw por aquel entonces sus ya antológicos Manolos? Y el año pasado la ABC intentó en vano resurgir la magia de Los Ángeles de Charlie, con tres protagonistas de muy buen ver (entre ellas, Minka Kelly de Friday Night Lights) y un guión más bien flojo.
Casi parece una broma de mal gusto, pero los rumores apuntan a que la Paramount quiere realizar una versión cinematográfica de Los vigilantes de la playa, con Justin Timberlake de protagonista (¿?) y cameos de David Hasselhoff y Pamela Anderson.
Además, este verano podremos ver si el lánguido Andrew Garfield da la talla como el nuevo Hombre Araña y tendremos que esperar hasta el año que viene para ver a Henry Cavill como Superman. También estoy deseando ver la última entrega de la franquicia de Batman iniciada por el genial Christopher Nolan. La saga Bourne también volverá a la pantalla grande, pero sin Matt Damon y con Jeremy Renner de protagonista.

Los guionistas hollywoodienses no tienen ganas de hacer funcionar sus perezosas neuronas y sólo piensan en recaudaciones millonarias (vale, es lógico) y yo parezco vivir en un estado de “Déjà vu” permanente.