martes, 16 de agosto de 2011

Capitán América, el (rutinario) inicio de una saga


Si el Capitán América ha venido a salvarnos del tedio estival, sólo lo ha conseguido a medias, al menos en mi caso. Tras leer la mayoría de críticas positivas y alabanzas hacia el film de Joe Johnston, esperaba algo más. Vale, no hay que ser demasiado exigente con este tipo de cine cuyo principal objetivo es entretener al personal, recaudar millones a mansalva y, de paso, volver a vender muñequitos articulados del héroe de turno. Aunque es innegable que la dirección de Johnston (Parque Jurásico III) es encomiable, al igual que la excepcional ambientación y los efectos especiales, diría que a Capitán América: el primer vengador le falta algo de chicha. Era un actor joven de relativo éxito (Los 4 Fantásticos, Cellular), pero gracias a Capitán América, sus futuras secuelas y The Avengers Chris Evans pasa a engrosar, desde ya, la lista de stars hollywoodienses del momento. Evans encarna a Steve Rogers, un mozo bastante famélico cuyo mayor deseo es alistarse en el ejército para luchar contra los nazis. Impresionado por la valentía del muchacho, un científico lo elige para un experimento que lo convierte en “supersoldado”. Rogers aumenta su musculatura y su -hasta ese momento escasa- fuerza en un santiamén (¡si fuera tan fácil!). Aunque en un principio el Capitán América no es más que un títere propagandístico, pronto decide enfrentarse al poderoso agente nazi Johann Schmidt (también conocido como Cráneo Rojo e interpretado por Hugo Weaving). Como en toda historia de superhéroes que se precie, no podían faltar la chica guapa (Hayley Atwell) y el leal mejor amigo (Sebastian Stan).

Capitán América no ha resultado tan trepidante como cabría esperar y el proceso de transformación del protagonista se dilata demasiado. Evans le pone ganas, pero no dota de carisma suficiente a su patriótico personaje (al fin y al cabo, no es Robert Downey Jr. ni Christian Bale) y el malo de Hugo Weaving (Matrix) tampoco me ha convencido. Y eso que el australiano es un actor como la copa de un pino, pero… Tommy Lee Jones no defrauda y la bella Hayley Atwell (Los pilares de la Tierra, Cassandra’s Dream) da un paso de gigante en Hollywood con esta película. Como curiosidad, aparece en un breve rol Nathalie Dormer, la arribista Ana Bolena de Los Tudor.
Al margen de la estupenda factura y demás aspectos técnicos, me ha encantado y sorprendido el impactante final, que por supuesto, no desvelaré. Podría decirse que en esta primera película nos presentan al héroe americano por excelencia, que ya tendrá tiempo de repartir mamporros y regalarnos escenas de acción con más enjundia en los siguientes largometrajes.


Capitán América: el primer vengador es un blockbuster veraniego que, aunque no cambiará la vida a nadie, merece ser visionado en pantalla grande, a poder ser acompañado de un gran arsenal de chucherías y un bajo nivel de exigencia.

Y ojo, porque al final de los créditos viene el tráiler de The Avengers, que reunirá a la crème de la crème de los héroes de la Marvel: Iron Man, Capitán América, Thor y Hulk.


2 comentarios:

S.G. dijo...

Jajajaja, Maikol! La verdad es que tampoco a mí me dejó el sabor de boca esperado... Eso sí, habrá que ir a ver The Avengers (iba a poner "Los Vengadores", pero me trae viejos y malos recuerdos de cierta película olvidable de Ralph Fiennes).
Cuando quieras hacemos una sesión de superhéroes: Ironman, Hulk (la de Norton), Thor... Para ir preparándose para el verano que viene... :P

Un saludo!

Nahia dijo...

Este verano no sé si me ha dado la impresión a mí o que, pero se han estrenado muchas películas de superhéroes.
Por lo general este tipo de filmes no me llaman demasiado, aunque tampoco me importa verlos.
Muy buena la descripción del origen del 'Capitán América', era uno de esos superhéroes que no sabía de dónde había salido.
Y muy fuerte que vayan a mezclar a tantos héroes en una misma película! Habrá que verla!

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