jueves, 7 de abril de 2011

¡Por fin he visto Pan Negro!

Se llevó nueve galardones en la última ceremonia de los Goya, incluyendo los premios de mejor película, director y actriz protagonista. Las lenguas más viperinas dijeron en su momento que la Academia quiso “vengarse” de Alex de la Iglesia… Desde luego, tras haberla visto yo no estoy para nada de acuerdo con tal afirmación.

Sí, estoy hablando de Pan Negro (Pa negre), dirigida por Agustí Villaronga y basada en la novela homónima de Emili Teixidor. Estamos ante uno de esos filmes que funcionan gracias al boca a boca, sin contar con una campaña de promoción fuerte ni con actores conocidos para el gran público. Ambientada en un pequeño pueblo de Cataluña durante la posguerra, Pan Negro pone de manifiesto que una buena historia siempre brillará más que unos efectos especiales de ultimísima generación. Su impactante escena inicial es tan sólo un preludio de lo que viene a continuación: un largometraje muy duro, rodado con maestría y excepcional realismo por el mallorquín Villaronga.

La historia se centra en Andreu (Francesc Colomer), un niño la mar de avispado que trata de averiguar la verdadera historia de su familia, con la ayuda de su excesivamente precoz prima Nuria (Marina Comas). Su mundo y todo en lo que creía pueden estar a punto de desmoronarse por completo.

El acertadísimo elenco de actores es una de las grandes bazas de Pan Negro. Todos merecen elogios: Nora Navas, Roger Casamajor, Laia Marull, Eduard Fernández, Sergi López… Pero si me tengo que quedar con uno, permitidme destacar la maravillosa labor del debutante Francesc Colomer (ganador del Goya al mejor actor revelación), que es quien realmente lleva el peso de la película. La verdad, no se me ocurre mejor manera de comenzar una carrera cinematográfica. Por cierto, hablando de chavales con talento…. ¿qué habrá sido de Andoni Erburu (Secretos del corazón)? En el fondo, Pan Negro es un crudo retrato de vencedores y vencidos, o lo que es lo mismo, de aquellos que comían “pan blanco” y los que debían conformarse con “pan negro”. Una de esas grandes películas que no olvidas fácilmente y te hacen pensar. Tal vez, mucho más de lo que desearías.

1 comentario:

Finileta dijo...

Mikel!!!! Ya veo que la peli te ha gustado. Me sorprendió que ganase tantos Goyas porque no la conocía previamente, pero teniendo en cuenta tu opinión parece que los premios fueron justificados.
Me la apunto para verla una de esas tardes que tenga los kleenex a mano ;)

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